Los palacios y casas señoriales del casco antiguo de Ciutadella nos hablan de la rutilante historia de Menorca. Desde finales del siglo XVII y durante todo el XVIII, con la dominación inglesa, se levantaron en la ciudad infinidad de palacetes en las zonas céntricas. Los nobles y terratenientes las erigían haciendo uso de un cierto alarde de posición social y poderío económico.
Estas construcciones se han convertido en auténticas joyas arquitectónicas, que mezclan a la perfección el estilo autóctono de Baleares con las tendencias británicas de aquel momento histórico. Los ingleses influyeron decisivamente en el arte y en las edificaciones menorquinas, aunque esta influencia supo adaptarse a las italianas y a los usos propios de la isla balear.
Esta fusión de estilos se plasma en las casas señoriales que pueden contemplarse paseando por el casco antiguo de Ciutadella. La mayor parte de ellas datan de finales del siglo XVIII o de comienzos del siglo XIX. Se trata de palacetes inconfundibles, con un amplio vestíbulo de entrada y bóvedas de aristas, que solían encalarse en primavera o verano. El acceso a la vivienda o planta noble se realiza por medio de una gran escalera, cubierta por una cúpula o lucernario. Algunos palacios poseen jardines interiores, generalmente en la parte posterior de la edificación.
Desde la Asociación de Comerciantes y Hoteleros de Cala Blanca, Santandria y Son Carrió te animamos a recorrer las calles del casco viejo de Ciutadella y deleitarte la vista con las fachadas e interiores de algunas de estas casas señoriales.
Casa de los Marqueses de Albranca
Este palacio ha sufrido sucesivas reformas y anexiones, que imposibilitan datarlo con certeza. Posee una espléndida fachada con siete balcones y un típico ático de estilo mallorquín. El edificio está amueblado con piezas de la época. La casa fue restaurada, aunque no se alteró ningún elemento de importancia.
Palacio Salort
Como el anterior, es de titularidad privada. Junto al Palacio de Torre-Saura conforman un conjunto urbano monumental de gran magnitud. Esta casona, antes denominada Palau Martorell, se empezó a levantar el año 1813. De su fachada destaca la piedra de marès, que contrasta con el blanco del interior del inmueble.
Casa Olivar
Es una de las más antiguas de la ciudad. Fue erigida en 1633. Este palacio tiene un gran protagonismo debido a su ubicación, frente a la Catedral de Ciutadella. La fachada posee elementos típicos del siglo XVIII.
Palau Saura
El palacete fue construido por la familia Amorós, procedente de Mallorca. Este clan desarrolló un estilo arquitectónico propio, caracterizado por los ornamentos de pilares, por las cúpulas, cornisas y arcos trenzados. La fachada principal llama la atención por la composición de pequeñas ventanas y por la cornisa volada y ornamentada. El Palacio Saura es de titularidad municipal.
Palacio del Baró de Lluriach
Se trata del palacio más antiguo de Ciutadella, pues data del año 1607. La planta noble del edificio se organiza, desde la escalera, a través de un gran corredor y tres patios.
Palau Squella
Esta casa aporta dos elementos particulares y que difieren de otros palacios de Ciutadella. Se trata del desarrollo de la escalera (con trazado en forma de zig zag) y del tratamiento que se dio a la fachada. Igualmente, destacan la composición de los pavimentos y la finura de las barandillas metálicas. El palacete es de propiedad privada.
Palacio Episcopal
El Palau Episcopal de Ciutadella nunca llegó a terminarse. Empezó a levantarse en 1789 bajo la dirección del arquitecto Francisco Sánchez. La fachada cuenta con balcones coronados y frontones triangulares y curvos. El salón del trono, hoy sala de juntas, alberga los retratos de todos los obispos de Menorca hasta la actualidad.
Casal de Ses Truqueries
Como el resto de casales de campo de la zona, es el fruto de una serie de ampliaciones y adaptaciones. Fue construido en el siglo XVII sobre un área llana y carente de vegetación. Está distribuido en dos plantas: la inferior tiene forma cuadrada y la superior se encuentra rodeada por una terraza. En la actualidad, el casal alberga un restaurante y es de titularidad privada.
Palau Segona Branca Saura
Del siglo XVIII. Ocupa toda una manzana. Este palacio fue el resultado de una compensación, que los británicos concedieron al caballero Joan Miquel Saura i Morell. El edificio ha sufrido importantes reformas y ampliaciones. En el siglo XIX, sus nuevos propietarios cambiaron por completo la decoración y le dieron un estilo “art noveau”. Es de titularidad municipal.
La nobleza y los terratenientes quisieron dejar su impronta en la arquitectura de Ciutadella y lo consiguieron. Estas casas señoriales y palacios son el reflejo de un momento histórico de la isla. Fueron testigos de la dominación inglesa y de un sinfín de avatares acaecidos a lo largo de los años. Hoy, sus piedras permanecen impasibles, a pesar de ser testigos de miles de hazañas, aventuras y desventuras de los ciudadelanos.
Fuentes: balearsculturaltour.net, Ayuntamiento de Ciutadella
Fotos: Flickr-Óscar Moreno, CharlotteSDS, Ayuntamiento Ciutadella